El excesivo uso de los mandos de tu PS4 produce un desgaste prematuro, entre los problemas más comunes se encuentra el referente a los botones R y L, que no son capaces de volver a su posición por sí solos, en estos casos es inevitable reparar el mando. A causa de una caída o una presión excesiva de los botones, estos pueden empezar a fallar impidiendo su uso.
Otra de las averías en el mando es el producido por el desgaste de las gomas de los sticks, estas empiezan a desintegrarse dejando a la vista el plástico duro del interior y haciendo que el tacto sea menos agradable.
Nuestros técnicos repararán todos los fallos que sufra tu mando para que puedas jugar en las mejores condiciones.